El aporte de la ciencia, tecnología e innovación en los tiempos de crisis por la enfermedad del coronavirus (COVID-19) es clave para enfrentar los actuales desafíos de salud, pero también para apoyar los esfuerzos productivos de la recuperación económica tras la pandemia, aseguraron hoy ministras, ministros, viceministros y altos responsables de ministerios y órganos rectores de estas áreas de varios gobiernos de la región, durante una reunión virtual sostenida con Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
La Reunión informativa de los países miembros de la Conferencia de Ciencia, Innovación y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TICs) -órgano subsidiario de la CEPAL- contó con la participación de autoridades de 15 países de la región: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay. Fue encabezada por Alicia Bárcena, junto a Shamila Nair-Bedouelle, Subdirectora General de Ciencias Exactas y Naturales de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), y Luis Adrián Salazar Solís, Ministro de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones de Costa Rica, en su calidad de Presidente de la Conferencia de Ciencia, Innovación y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones [1].
Durante el encuentro, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL presentó un panorama del sistema científico y tecnológico actual en América Latina y el Caribe y sus principales desafíos. Señaló que la infraestructura digital se encuentra particularmente rezagada en comparación a otras regiones y que, por ello, el desarrollo y adopción de soluciones digitales debe considerar los elementos estructurales de los países y los factores habilitantes. “Se debe fortalecer la integración regional, las capacidades en la industria de la salud, y la economía digital”, indicó.
“La pandemia ha puesto en evidencia la necesidad de un enfoque que trascienda lo nacional, y fortalezca la integración regional a partir de sistemas de Ciencia y Tecnología vinculados entre los países y sus sistemas productivos. La humanidad está en una carrera para encontrar una vacuna y tratamientos que permitan neutralizar los efectos sanitarios de la pandemia y es aquí donde los esfuerzos conjuntos y coordinados se tornan fundamentales”, declaró Alicia Bárcena.
Agregó que el aporte de la ciencia, tecnología e innovación en los tiempos de la pandemia, y de las políticas e instituciones que las promueven, no están limitadas a la prevención o tratamiento de la enfermedad. “Tenemos que acercar la ciencia, la tecnología y la innovación a los sectores productivos”, señaló, como es en el caso de la fabricación de insumos médicos, de diversos productos de protección sanitaria, de exámenes para detectar el virus, y de equipos médicos críticos como por ejemplo los ventiladores mecánicos, entre otros.
También explicó que la pandemia ha obligado a adoptar nuevas formas de trabajo, de educación y de relacionarnos los unos con los otros. Los desafíos tecnológicos y sociales para poder ofrecer la posibilidad de teletrabajo a la mayor cantidad de personas, y de teleducación, para que los niños, niñas y adolescentes puedan continuar con sus estudios, han sido importantes y debemos tomarlos en cuenta en estos momentos, dijo.
“Sabemos que la contribución de la ciencia, la tecnología y la innovación en esta crisis es inmediata. Por lo tanto, en estos tiempos de pandemia tenemos que pensar cómo podemos abordar la situación actual y la de post COVID-19. En ese sentido, la relación entre la ciencia, la tecnología y el sistema productivo nacional va a ser fundamental. Sobre todo porque va a haber cambios muy significativos en el comercio internacional y las cadenas de suministros en sectores claves se verán cortadas o debilitadas y, por lo tanto, será necesario desarrollar a nivel local y regional una nueva forma de producir bienes y servicios más localmente”, indicó Alicia Bárcena.
En su presentación, la máxima autoridad de la CEPAL explicó que el aporte de la ciencia, tecnología e innovación frente a la crisis del COVID-19 se da en varios ámbitos: primero, en la investigación y desarrollo, para comprender la enfermedad y sus efectos en la población, así como para de vacunas y medicamentos; en segundo lugar, en la gestión de insumos y equipos críticos, como tests de diagnóstico, ventiladores mecánicos y desarrollo de aplicaciones para el monitoreo y prevención; y tercero, en la recuperación económica, con el desarrollo de plataformas digitales para salud, educación y trabajo a la distancia, y la transferencia tecnológica y reconversión industrial.
Sin embargo, la baja inversión en investigación y desarrollo (I+D), que llega al 0,7% del PIB de la región en promedio, y el bajo porcentaje de investigadores dedicados a I+D (3%) demanda una urgente gestión estratégica, recalcó Alicia Bárcena. También remarcó que el desarrollo y adopción de soluciones digitales están condicionadas por factores estructurales de los países de la región. Por ejemplo, en materia de teletrabajo, en promedio solo 26,6% del empleo formal de la región puede realizar su trabajo desde casa, con una variación significativa entre países. Además, el teletrabajo tiene un impacto diferenciado en las mujeres debido a la injusta división sexual del trabajo y su excesiva carga de trabajos no remunerados de cuidado y labores domésticas.
En tanto, con respecto a la teleducación, explicó que existen aún importantes problemas de conectividad -falta de acceso a equipos y conexión a Internet- que dificultan la educación a distancia en la región. En los países con menores niveles de conectividad, menos del 20% de los estudiantes pertenece a un hogar con conexión a Internet, indicó Bárcena. Además, la alta incidencia de hacinamiento, especialmente en los quintiles de menores ingresos, afecta la calidad de la educación a distancia, advirtió.
Según datos del Observatorio Regional de Banda Ancha (ORBA) [2] de la CEPAL, existe en la región una alta desigualdad en la conectividad digital. La condición económica, edad y ubicación geográfica limitan el acceso a la conectividad y las brechas de acceso entre los hogares de más altos y bajos ingresos son significativas. De esta forma, el acceso a plataformas digitales -por ejemplo, el teletrabajo- no son asequibles para toda la población.
“En este contexto de urgencia, la Conferencia de Ciencia, Innovación y TICs de la CEPAL se presenta como un espacio de colaboración y construcción conjunta de iniciativas y capacidades regionales; y a su vez, para dar a conocer los esfuerzos y políticas que los países de la región están impulsando para diseñar instancias de coordinación y cooperación entre los países de la región. Aprovecho esta oportunidad para agradecer el liderazgo del gobierno de Costa Rica en su calidad de Presidente de la Conferencia, así como también a los países que conforman el Comité Ejecutivo de esta Conferencia”, señaló Bárcena.
La Secretaria Ejecutiva de la CEPAL informó también que la Comisión se encuentra realizando estudios y reportes especializados sobre análisis de uso de tecnologías digitales en tiempos de COVID-19, así como un documento de posición sobre el panorama digital en la región. Asimismo, está organizando un diálogo de alto nivel y técnico con los países sobre uso de las tecnologías digitales frente a la pandemia.
“El mundo post COVID-19 nos exige más integración regional. Debemos pensar el futuro de la región en la nueva geografía económica para depender menos de manufacturas importadas e imaginar cadenas de valor regionales. Se requieren políticas industriales y tecnológicas que permitan a la región fortalecer capacidades productivas y generar nuevos sectores estratégicos”, enfatizó la alta funcionaria de las Naciones Unidas.
“Para incidir en la nueva economía mundial, la región debe avanzar hacia una mayor innovación, integración productiva, comercial y tecnológica. Un mercado integrado de 650 millones de habitantes constituiría un importante seguro frente a perturbaciones generadas fuera de la región”, declaró también Alicia Bárcena, junto con recordar que la CEPAL está trabajando en una propuesta para un nuevo régimen de protección social universal con un ingreso básico ciudadano, así como en una gobernanza internacional inclusiva y sostenible con base en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
“Lo que buscamos es poner a la ciencia y tecnología al servicio de las personas, abrir un nuevo espacio de desarrollo con nuevos sectores, servicios y productos, un desarrollo productivo y tecnológico. Quiero destacar que estamos en el momento para que la región dé un paso muy importante hacia adelante y avanzar juntos con mayor cooperación. La CEPAL se compromete con ustedes y se pone a disposición de los países para llevar adelante todas las iniciativas que se han propuesto”, dijo la Secretaria Ejecutiva del organismo al cerrar el encuentro.