La incorporación de la Internet de las cosas en los procesos productivos (Internet industrial) implica la adopción de tecnologías digitales que dan lugar a innovaciones y nuevos modelos de producción y de negocios. En este panel se analizará en qué medida los países de la región están incorporando la Internet de la producción y si cuentan con los recursos humanos necesarios para implementar este nuevo modelo. Se prestará especial atención a los desafíos que esto implica para la ciencia y la innovación.
La irrupción de la economía a demanda afecta a diversos mercados, como el transporte público, el turismo o la externalización de servicios (de traducción, contabilidad u otros). Esto ha tomado a la región por sorpresa, y las respuestas de política han sido erráticas y han venido determinadas por elementos de presión coyuntural. Las posibilidades de expansión de las pymes aumentarán en la medida en que se incorporen activamente a la creación y operación de aplicaciones en esta economía. En este panel se discutirán alternativas para incorporar esta nueva realidad de la economía, potenciando sus efectos sobre la productividad empresarial y el bienestar de los consumidores, y se identificarán medidas de política para que las pymes avancen en esta dirección.
Más del 50% de los habitantes de la región son usuarios de Internet, cifra que sube a más del 70% en el caso de los millennials (15 a 30 años) Pese a este gran avance, hay grupos sociales y áreas que no cuentan con un acceso físico o que enfrentan precios de conexión demasiado altos para sus niveles de ingreso. Simultáneamente, aumenta la presión por la demanda de mayores velocidades y menores latencias permitidas por tecnologías aún rezagadas en la región, como 4G, o que la impactarán fuertemente en el mediano plazo, como 5G. En este panel se discutirán medidas de políticas para aumentar la conectividad y, reducir sus costos (en particular, el de la itinerancia de datos o roaming de datos), acelerar el despliegue de las redes de 4G y preparar el ingreso de 5G.
Las tecnologías digitales han transformado el mundo con base en innovaciones disruptivas que afectan al conjunto de la economía, reconfigurando las cadenas de valor de sectores como la manufactura, el transporte, la salud, el entretenimiento, la banca y las finanzas y el sector público. Esto fomenta la innovación y las interrelaciones entre firmas existentes y nuevos actores y origina ecosistemas de plataformas digitales de productos y servicios, así como innovadores modelos de negocios. Estos ecosistemas se están convirtiendo rápidamente en el modelo de referencia de la economía digital, impulsado por consumidores que demandan productos y servicios con soluciones intuitivas, en tiempo real e integradas entre las distintas industrias. Esta transformación requiere mejorar la infraestructura, el capital humano y el entorno empresarial para promover la inversión, la innovación y el emprendimiento. El desarrollo del ecosistema digital demanda un entorno de sana competencia y colaboración de todos los actores.